DES2017 – Digital Business World Congress

Ya tiene mérito conseguir que los suecos vengan a España a algo más que a disfrutar de nuestras bondades gastronómicas y del ocio en las playas. Si a eso se le suma que Madrid sea la sede del mayor evento internacional sobre transformación digital, ya tenemos noticia. Siendo Suecia el país socio y Madrid la sede, merece la pena saber qué se cocinó en el IFEMA. Hablemos pues del DES2017 que se acaba de celebrar del 23 al 24 de mayo en Madrid.

Inauguración Pabellón Suecia 2
La transformación digital es un proceso continuo de incorporación de las tecnologías del siglo XXI a los procesos de negocio y a la sociedad misma. Estos procesos se agrupan en 5 grandes bloques, que como la mayoría de estos temas vienen denominados en inglés. Son: “Big Data & Analytics”, “Blockchain”, “Cloud”, “Internet of Things”, “Artificial Intelligence” y “Cybersecurity”. Hemos hablado largo y tendido de cada uno de estos temas. Entiendo que nos suenan familiares. ¿Por qué es tan importante que las empresas los vayan incorporando a toda máquina a su “backbone”? (manera cursi, pero auto-explicativa de denominar a la columna vertebral en la que descansa la viabilidad de las compañías). Pues la respuesta la dio de una forma muy comprensible el responsable de Inteligencia Artificial de IBM, D. Antonio Rodríguez Perales:Para quedarse con la relación con el cliente”.

IMG_8802Es importante esta afirmación. Hasta los bancos, que tienen una gran cantidad de información “sensible” de sus clientes, tienen claro que, o ganan esta transformación digital, o “sus” clientes se irán con quien le ofrezca este servicio de una forma más digital, rápida, cómoda y barata (Amazon, Facebook, compañías Fintech, etc.). Antes se iba a la oficina del banco, después se les llamaba por teléfono. Ahora si no se puede tener una relación digital y hay que llamar, el enfado está garantizado.  En resumen, en esta nueva sociedad 4.0, el cliente está en el centro de todo. Cada día tiene más alternativas. Busca la comodidad, la inmediatez y el servicio. Es fiel a esos objetivos, no a las empresas per se. Quien no entienda esto, perderá a sus clientes y peligrará su propia existencia. Desaparecerán del mercado.


¿Qué implicaciones tienen todos estos temas a nivel usuario?
Pongamos un ejemplo de actualidad en cyber-security. El reciente virus de tipo “ransom-malware” tristemente famoso por haber infectado a múltiples ordenadores a lo largo de las últimas semanas. Es lamentable que se haya producido por falta de actualización de ciertos sistemas operativos. Difícil de entender en grandes empresas que además nos sugieren que les confiemos nuestros datos, que afirman estarán seguros con ellos, cuando no son capaces de mantener seguros los de sus propios trabajadores. También lamentable por parte de los sistemas de seguridad cibernética (tipo firewall). ¿Por qué digo esto? Este virus, (pido disculpas por anticipado a los expertos en estos temas por la simplificación) cogía una gran cantidad de ficheros almacenados en el disco duro del ordenador y los encriptaba. Al hacer esto, el ordenador, en sus procesos de acceso a dichos ficheros, se veía incapaz de leerlos, abrirlos, etc. y por tanto el usuario perdía el control sobre el contenido de su disco duro. El virus ofrecía liberar esos ficheros a cambio de un pago (ransom sum). ¿Es razonable pensar que el trasiego de miles de ficheros para ser encriptados pase desapercibido para un anti-virus? ¿Entiende un anti-virus que este comportamiento es normal, que no es anómalo? Está clara la respuesta. Algunos dicen que la vergüenza de no admitir que se detectase su efecto es inferior a la vergüenza de admitir que se les ha colado en el sistema en primer lugar. Dejo a cada cual que razone su propia opinión.

El impacto directo de este virus ha sido residual. Algunos dicen que sólo han capturado unas decenas de miles de euros a nivel global. Sin embargo, el impacto a nivel indirecto es mayúsculo. ¿Cuál es el impacto en negocio para empresas que quieren que les confiemos nuestros datos? ¿Cuál es el impacto en la credibilidad de los sistemas que nos venden para protegernos? Eso no son decenas de miles de euros. Eso son millones. Ahí está una de las poderosas razones para abrazar esta transformación digital. El impacto de no hacerlo es superior al coste de tener que hacerlo. La propia supervivencia en muchos casos.

ALEX TAPSCOTT_2

Hemos hablado de Cyber-seguridad, pero no fue lo único. La tecnología Blockchain o los sistemas cognitivos basados en la Inteligencia Artificial ya están definiendo la nueva etapa de las organizaciones. Gente como Alex Tapscott o los máximos directivos de IBM y Amazon Web Services, así lo manifestaron en el DES2017. La tecnología de Blockchain (Cadena de Bloques) es la que hay detrás de ciertas cryptomonedas como el famoso bitcoin. Soy muy escéptico con dichas monedas, pero me atrae mucho la tecnología que hay detrás. Que se lo digan a los bancos que están como locos intentando incorporarla a sus procesos y por el camino comprando todo lo que suene a tener un conocimiento sobre ella (llamarse Fintech “lo que sea” parece que ayuda).

DES2017

El DES2017 está en plena fase de crecimiento. Sólo lleva dos citas y ya genera más de 34 millones de Euros de impacto económico en Madrid. No son los cientos de millones que deja el MWC en Barcelona, pero todo suma. Han participado 18.000 personas en su mayoría cargos de alta dirección o que participan en la toma de decisiones de sus compañías. Esto último es importante. No es una feria de “paseantes”. Además de Suecia como país invitado, tuvieron pabellón propio Holanda y Polonia. Casi un 30% de los visitantes vinieron del extranjero. Un buen dato también.

En este contexto, se entiende la importancia del concepto “transformación digital”. Esto es imparable. Va a ir a más. Madrid ha visto esta oportunidad, y ha acogido al DES2017. A partir de ahí sólo queda que se pueda potenciar, tanto a nivel público como privado. Barcelona con el MWC y Madrid con el DES es algo muy bueno para el país. Les seguiremos en la próxima edición, mismas fechas, año 2018.

 

Francisco Canós

 

Artículo publicado el 16 de Mayo de 2017 en: diario-abierto-logo

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